Los ortodoncistas emplean un conjunto completo de equipos avanzados para abordar las desalineaciones dentales y los trastornos de la mordida, garantizando que los pacientes logren sonrisas tanto funcionales como estéticamente agradables.
Para empezar, las herramientas de diagnóstico son fundamentales.
Las máquinas de rayos X panorámicas y cefalométricas proporcionan imágenes radiográficas detalladas de los dientes, las mandíbulas y las estructuras craneales, lo que permite a los ortodoncistas evaluar las relaciones esqueléticas y el desarrollo dental.
Las cámaras intraorales ofrecen una vista ampliada en tiempo real de la cavidad bucal, lo que permite una documentación precisa de la posición de los dientes y la salud de las encías. Como complemento,
los escáneres de impresiones digitales han reemplazado las impresiones tradicionales con masilla, creando modelos 3D de alta precisión de los dientes y las encías. Estos modelos digitales luego se utilizan en
sistemas CAD/CAM (Diseño y fabricación asistidos por computadora) para planificar tratamientos y fabricar aparatos personalizados como aparatos ortopédicos y alineadores transparentes.
Cuando se trata de tratamiento activo,
los brackets de ortodoncia (disponibles en metal, cerámica o plástico) se adhieren a los dientes y se pasan
arcos (a menudo hechos de níquel-titanio o acero inoxidable) a través de ellos. Estos alambres ejercen una fuerza controlada para mover los dientes y lograr su alineación adecuada.
Las ligaduras (bandas elásticas o bridas metálicas) aseguran los cables a los brackets, mientras que
los alicates, cortadores y pinzas especializados permiten a los ortodoncistas ajustar estos componentes con precisión durante las citas de rutina.
Los elásticos (bandas de goma) son otra herramienta crucial que se utiliza para corregir las discrepancias en la mordida aplicando fuerza entre arcadas entre la mandíbula superior e inferior.
Para los casos que requieren intervenciones más complejas, como la realineación de la mandíbula, los ortodoncistas pueden colaborar con los cirujanos orales, utilizando
guías quirúrgicas para garantizar resultados precisos. Después del tratamiento activo,
los dispositivos de retención como retenedores fijos o removibles son esenciales para mantener los resultados. Los ortodoncistas utilizan herramientas para personalizar estos retenedores, ajustándolos según sea necesario para evitar la recaída de los dientes.
Desde imágenes digitales de última generación hasta diminutos equipos de ortodoncia, cada equipo desempeña un papel integral en la capacidad del ortodoncista para diagnosticar, planificar y ejecutar tratamientos que transforman la salud y la confianza bucal de los pacientes.